UN ANGEL EN AFGHANISTAN

Miércoles, 03:30 de la madrugada, sin saber muy bien por qué me despierto de mi placido sueño, no puedo conciliar el sueño nuevamente y hasta las 07:00 no había quedado con el #Peazoteam para el entrenamiento diario. Esta vez no iba a ser igual, esta vez se trataba de mi última carrera por tierras afghanas. Solo tenía que completar 11K para llegar a los 1000K en los 93 días que este año he pasado en “Territorio Hostil”. Como no podía conciliar el sueño me he puesto a recoger todos y cada unos de los recuerdos que me han acompañado durante los últimos 4 años, fotos de todos los veranos, dibujos de mis hijos con distintas edades, la bandera afghana que me acompaña a esta tierra desde el día que cruce la meta de la “I Maratón FSB Herat” y por supuesto, la bandera española que me acompaña allá donde quiera que vaya, bien sea de misión o bien sea a alguna prueba deportiva importante. Atrás quedan 5 destacamentos en 4 años, mas de 400 días, son muchos recuerdos y vivencias los que he vivido en este “Corimec”, siempre compartido con mis compañeros de MIZAR, muchas conversaciones de complicidad en otros tantos días de convivencia, muchos días de lágrimas sin que nadie te vea y muchos días de alegrías intentando compartirlos con el resto de tus compañeros. Desde mi llegada a Afghanistan por primera vez allá por el verano del 2010, siempre he sentido que algo me protegía, un ente, algo mágico que siempre me permitía volver a casa sano y salvo. Soy creyente y desde ese día siempre llevo colgado al cuello una medalla con la imagen del Cristo y la Virgen de mi ciudad natal, Elda. Fue un regalo que me hicieron mis tíos y mi Abuela a la que tanto quiero y que tanto he echado de menos y que tan buena suerte me ha traído. Pero ha tenido que ser en este último destacamento cuando he descubierto a un ANGEL que siempre ha velado por mi bien y por el de todos en general.

Fue nada más bajar del avión cuando me di cuenta de que esta vez iba a ser diferente, todo comenzó con un abrazo que resumía los muchos años que dos amigos habían pasado separados por circunstancias profesionales y precisamente, esas mismas circunstancias profesionales han sido las responsables de nuestro reencuentro. Este Ángel siempre ha tenido una palabra de aliento y de ánimo cuando más lo necesitaba, a pesar de que a veces era él el que necesitaba de su propia medicina, este Ángel es capaz de efectuar varias tareas a la vez para satisfacer las inquietudes del resto de compañeros, como por ejemplo, dando clases de ruso, clases de Fitbool, asistir a entrenamientos de Jiyistsu y yoga enriqueciendo las clases con su presencia y así un largo etc durante más de 6 meses seguidos. Capaz de relacionarse con todo tipo de gentes sin importar ni su sexo, religión, nación o empleo. Este Ángel ha sido el que ha puesto un poco de cordura siempre que el grupo que he bautizado como #Peazoteam lo ha necesitado, incluso me acuerdo de un entrenamiento duro de verdad en el que la rutina de trabajo no me parecía la correcta y que con un tono no apropiado yo le recriminaba y este con muy buenas palabras y sin perder las formas que dictan el cielo me contestaba a mi insistencia.

Siempre se anticipaba y te daba un abrazo cuando tú lo requerías, te preguntaba cuándo por tu cabeza rondaba algún pensamiento o alguna inquietud que tú desde aquí no podías resolver y el sabia de él sin que tú dijeras nada al respecto. Se había leído los libros que yo mismo me había leído y siempre podíamos comentar sobre su argumento y lo más importante de todo, es que siempre anda con una sonrisa en la cara que disimula sus propios sentimientos anteponiendo tus problemas a los suyos.

Por todo esto estoy convencido de que en este destacamento he tenido la suerte de coincidir con un Ángel que ha cuidado de todos y de todo.

 

Este Ángel se llama Fran Moreno Chaves, es Comandante del Ejército del Aire y quiero darle las gracias por velar por todos y especialmente por mí. Su compañía me ha enseñado muchas cosas, tanto en lo personal como en lo profesional y me ha enseñado a ser un poquito mejor en la vida. Sé que a partir de ahora esta amistad ya nunca más se verá separada como hasta hace escasos 3 meses. Por todo ello solo me queda decir que los Ángeles existen y solo hay que prestar un poquito de atención para que cada cual encuentre el suyo, el mío ya lo he encontrado y tiene nombre y apellidos.

 

GRACIAS FRAN!!!!!!

La cosa mañana marcha dirección a España!

Fdo: Pascual Vargas (Afghanistan Runner.)